
Amane Kujou es una entusiasta del atletismo que participa regularmente en el club de atletismo. Aunque disfruta haciendo ejercicio, sufre de un deseo sexual excesivo, una preocupación típica en los clubes deportivos. Amane está algo insatisfecha con su amable novio, quien no llega ni al extremo de besarla, posiblemente porque le importa, por lo que se masturba a diario para aliviar el estrés. Sin embargo, un casero de mediana edad la graba haciéndolo, y a cambio de borrar el video, el anciano le pide a Amane que lo borre.